ARBITRAJES

Últimamente anda el patio deportivo futbolístico un poco alterado, especialmente por el tema arbitral. Desde que este deporte es lo que es, la labor arbitral ha sido siempre denostada, criticada y puesta en entredicho, en especial cuando sus decisiones suponen algún perjuicio a los llamados grandes. Pero este año la cosa está alcanzando problemas de auténtica epidemia. Llevamos unas cuantas jornadas de Liga en las que los árbitros están continuamente en el ojo del huracán. El colmo se ha alcanzado con el pase del FC Barcelona en la eliminatoria frente al PSG y su remontada histórica en la que la actuación del árbitro ruso llamado Aytekin, ha levando ampollas. Curiosamente no en los franceses, sino en la parte no barcelonista de los hinchas hispanos. Tanto que incluso se ha levantado una iniciativa popular par pedir a la UEFA que repita el partido!!! Alucinante. La guinda del pastel se produjo el domingo con el partido Real Madrid-Betis, con una actuación bastante flojita de Mateu Lahoz que no ha hecho más que llevar más leña al fuego. Las famosas dos Españas se enfrentan en el rectángulo de juego y con saña. Todo esto muy bien orquestado por ciertos ¿periodistas? que saben como soliviantar al personal.
Miren, un poco de cordura. Yo pienso que los árbitros son unos seres humanos con una labor muy complicada y que para realizarla hay que ser un poco masoca. Cometen errores, algunos flagrantes, pero ellos mismos se consideran un poco por encima del bien y del mal, con actuaciones rayando en la chulería más despectiva. Pero estos errores, se quiera o no, es la salsa del fútbol. Ni los nuevos adelantos tecnológicos van a impedir las trifulcas que se preparan con sus actuaciones. Ayudarán para que algunas decisiones equivocadas se corrijan, pero en lo esencial nada va a cambiar. Se saben muy bien el reglamento, pero del concepto fútbol como juego, cero patatero.
Lo que no es de recibo son estas campañas muy bien orquestadas , que entretienen al personal, lo tienen ocupado en otros menesteres, para que no piensen y gasten unas valiosas energías que son necesarias para solicitar y exigir lo que verdaderamente importa.
El fútbol es un deporte maravilloso, cada vez mas markentinizado, que juega con las ilusiones, expectativas y esperanzas de millones de personas que se ven reflejadas en su equipo favorito, y que les lleva a cometer auténticas locuras. Es una droga social, cada vez más peligrosa. A mí cada vez gusta menos y me aburro más. Como juego es muy injusto, y en eso radica su encanto aunque suene incongruente, no necesitas jugar bien para ganar, solo hacer un gol más que el contrario, usando las armas legales o no que lo permitan. Un deporte del que todo el mundo sabe y pontifica, aunque no hayan dado un patada a un bote en su vida, y que busca siempre un culpable de la derrota, en muchas ocasiones los árbitros. Pero, de esto a lo que se está llegando hay un trecho. Sin embargo ¡ de qué hablaríamos los lunes!