martes, 12 de julio de 2016

¿Y SI SE VAN LOS CUATRO?
(no saber ganar, no saber perder)


Se veía venir, tras los resultados del 26-J había que montar un sudoku parecido al de las anteriores elecciones y que se saldaron con un sonoro fracaso. Por supuesto la culpa es de los demás y ningún partido, en especial los que bajaron de votos, han hecho las más mínima autocrítica y miran para otro lado cuando alguien osa preguntar si van a tomar alguna medida. Nadie quiere unas terceras elecciones, pero no están poniendo un solo motivo para que esto no ocurra. Todos dicen que no hay líneas rojas, es cierto no las hay, las hay negras y la ciudadanía ve pasar los días observando a nuestra clase política como si fuera un jardín de infancia, donde se ponen morritos, no se "ajuntan", y que fulanito que me quiere quitar la merienda. Lo digo en este plan "relajado" porque, de verdad, el espectáculo que están dando es bochornoso y una demostración clara y meridiana de que la gente les importamos un comino.
Voy a analizar con humildad lo que, ahora mismo, se ofrece.
PP. sin ninguna duda fue el gran vencedor de las elecciones, pero no fue el ganador. Sus 137 diputados, por sí solos, no les auguran una legislatura fácil y menos con un líder como Mariano Rajoy al que le sigo sin entender nada de lo que dice, ni de lo que hace??? Su demostrada incapacidad para lograr acuerdos mínimos  y ser magnánimo con quienes pueden ayudarle es proverbial. Es claro que ese "tancredismo" político le ha dado buenos resultados, pero todo tiene un límite en la vida. ¿Ha pensado seriamente en marcharse y dejar a alguien que no genere tanto rechazo y que, a buen seguro, daría más opción para el acuerdo? Además quedaría como un caballero y un buen español, si se queda a saber como acaba.
PSOE. Estos si que son buenos. Pedro Sánchez lleva dos elecciones en tres meses cosechando los peores resultados de la historia democrática de su partido y ¡¡¡no dimite!!! Por mucho menos, Alfredo Pérez Rubalcaba sí lo hizo. Siempre habrá clases. Vuelve a repetir su famoso no es no, que por si no lo sabe, cada vez que lo dice suben las acciones de los chicos del PP. ¿No hay nadie en todo el socialismo español que le diga muy suavemente que su hora ha pasado? ¿Su desmedida ambición le impide ver la realidad? ¿O tiene una corte de aduladores tan potente que lo tienen anestesiado? El tomate de todo este asunto está en sus manos, sus 85 diputados son básicos en la investidura, si tanto ama a España como dice... Espero que no se le ocurra un plan alternativo de intentar formar gobierno como le sugieren algun@s ¿¿colaboradores??, porque el socialismo español quedaría peor que el griego, que ya es decir. De la autocrítica por cómo están en esta situación, no he oído nada. 
UP. Estos están todavía en sock. Esperaban la gloria y no les ha llegado ni los laureles. Parece mentira, un grupo de politólogos como ellos, que creen que saben entender a la gente, no se han enterado todavía por donde va la mayoría de la cabreada sociedad española. Ahora ven fantasmas por todos los lados y no dejan de mirarse el ombligo, quizá habría que decirles que una de las causas de su bajada electoral, aparte de unión con IU, es que la experiencia actual de los lugares donde gobiernan o ayudan a hacerlo no es precisamente alentadora. Mucha teoría social, mucho manual científico, pero poca "chicha" real. Su líder, Pablo Manuel Iglesias, cuya soberbia intelectual ya ha quedado muy demostrada, no ha sabido hacer autocrítica tampoco  y es un buen momento para demostrar de primera mano que los consejos que da a los demás de cómo realizar las cosas se los aplique a sí mismo. Como gesto de humildad. Y si quieres dar un golpe memorable de verdad, ¿has pensado en la abstención en la posible investidura de Rajoy?  El PSOE quedaría en fuera de juego y serías el auténtico líder moral de la oposición. A medio y largo plazo podría serte rentable. Piénsalo.
Ciudadanos. A estos no les entiendo. A lo mejor no se entienden ni ellos. Su líder, Albert Rivera, nunca sé si va o viene. Será catalán, pero es más gallego que Rajoy. Quiere ser el bueno de la película y se queda a mitad camino entre el malvado y el tonto. Y creo que este partido, como en todos, hay gente que piensa y sabe del asunto, pero por esas memeces de la disciplina de partido y demás zarandajas están encorsetados. ¿Es ésta la regeneración de la que hablas, Rivera? Su lema de que no le favorece la ley electoral está muy gastado,  si estás jugando el partido es porque aceptas las reglas. Qué se pueden y deben cambiar, claro, pero no eches las culpas de tu descenso electoral a ello y si quieres influir de verdad vas a tener que bajar al barro y mancharte, no puedes estar eternamente con esa impecable camisa blanca inmaculada. Este humilde blogger se permite decirte que como haya terceras elecciones vas a perder esa hermosa camisa. Los españoles te la van a quitar.
Así que visto el panorama de nuestros líderes???? políticos no sería una mala idea el que se fueran los cuatro al carajo y dejarán a otr@s  que verdaderamente tengan ganas de resolver los problemas reales de la gente. 

sábado, 2 de julio de 2016

FIN DE CICLO
( y no pasa nada)


El partido de la selección española de futbol contra Italia (vaya baño que nos dieron) ha sido el final, triste, de un ciclo que comenzó en 2008. Eso es lo que hay que valorar. En realidad el ciclo comenzó a finiquitar el día en que tipos como Xavi, Pujol, Villa, dijeron adiós a la selección por diferentes causas, ha sido morir estirando la goma un poquillo más, a ver si sonaba la flauta. El cénit del equipo y su forma de jugar, el famoso Tikitaka, llegó en la final de 2012 frente a Italia, a partir de ahí tenía que haberse producido el lógico cambio y renovación que el equipo pedía  a gritos. Pero, erróneamente, se mantuvo al seleccionador que ya demostraba que no era capaz, por unas u otras razones, de acometer el inapelable cambio. Mantuvo a jugadores que ya habían dado lo mejor de sí mismos con la selección, por cariño o porque no confiaba en nuevas generaciones, no buscaba sangre fresca ni nuevas ideas, tal vez porque el tikitaka ha calado tan profundo en el alma hispana que creemos que todos valen para jugar ese sistema. Y no, eso vale si tienes los mimbres adecuados, si no es así hay que cambiar, D. Vicente. Lo siento míster, pero en mi modesta opinión ese error es suyo. Y ese error lo ha evidenciado en lista de elegidos para esta  Euro 2016, jugadores que no han tenido una buena temporada en sus clubes han ido por la inercia de la confianza y el cariño.  Y ya ve como le han pagado míster, y le pongo como ejemplo a Pedro (cría cuervos...). Otros como Cesc tampoco tenían razones para su asistencia. Al fin y al cabo, a la hora de la verdad, solo tenía confianza en 11 ó 12 a lo sumo, el resto venía a rellenar grupo. Que Iniesta en el Barça tiene a Busquets y Rakitic para hacer un trabajo que en la selección se echa en falta, que Nolito me parece un jugador sobrevalorado y veremos ahora en el City que demuestra, que Silva no estaba en su mejor momento (este jugador ha jugado 100 partidos con la roja y no recuerdo más de 3 ó 4 buenos), que a Ramos le falta mucha clase y talento para ser el líder de la selección, que Jordi Alba ya no sorprende tanto como antes, que en el Barça y en la roja quién da las sensaciones es Sergio Busquets, si este jugador juega a su nivel, España y el Barça  juegan a una cosa y si no lo está a otra peor, que Morata promete pero... que Casillas, ¿a qué fue?, que Piqué tiene sus limitaciones y los rivales las conocen muy bien,... 
Ahora, ya oficialmente hay otro seleccionador y es el momento de esas nuevas generaciones de jugadores, De Gea, Thiago, Koke, etc... que tienen que dar un paso al frente y demostrar todo lo que, a priori, se les supone. Porque si no es así, vamos a estar en el lado oscuro otros 80 años. Agradezcamos haber disfrutado de estos años excelentes y a seguir, que la vida es así.
No quiero despedir este post sin hacer mención a los locutores y comentaristas de la televisión que retransmitía los encuentros; sólo una cosa: ¡INFUMABLE e INDIGNANTE! Eso no es periodismo, es otra cosa que me callo, por educación.